Probablemente debido a la pandemia del coronavirus, estas próximas rebajas que se aproximan: black friday, cyber monday, sean las más digitales de la historia.
Por precaución, muchas personas aprovecharán para hacer sus compras on-line, especialmente en tiendas que minimicen gastos de envío, evitando colas y aglomeraciones en locales físicos.
Aunque no me gustaría obviar antes de continuar, que a pesar de la comodidad y seguridad frente a la covid-19 de comprar desde casa, el pequeño comercio nos necesita más que nunca. Me refiero a esas tiendas de barrio, muchas de ellas sin página web o catálogo on-line, que están sobreviviendo como buenamente pueden, y dónde a pesar de que sea periodo de rebajas, nunca encontraremos las aglomeraciones de un Zara o El Corte Inglés. Este año más que nunca, aunque nos rasquemos un par de euros más en el bolsillo porque en ocasiones es complicado puedan competir en precios con los gigantes, creo necesario el esfuerzo de adquirir nuestros regalos en este comercio local.
También antes de continuar, creo interesante repasar de dónde vienen estos conceptos:
- El Black friday tiene su origen en los EEUU, coincide con el primer viernes tras el “Día de Acción de Gracias”, y originalmente estas rebajas sólo eran para tiendas físicas.
- El Cyber monday coincide con el lunes siguiente al Black friday, y surge promovido por tiendas de comercio electrónico como Amazon, como respuesta a las rebajas del viernes anterior.
A día de hoy, como todo el mundo sabe, ambas rebajas son tanto en tienda física como on-line, y prácticamente han sido exportadas a medio mundo, incluyendo España.
Y ahora vamos al lío… porque especialmente en estos días, debemos prestar atención a intentos de fraude durante nuestras compras on-line
Algunos consejos útiles:
Prestar especial cuidado con correos electrónicos y SMS recibidos en estas fechas. Nuestros buzones se llenarán de publicidad y jugosas ofertas, y es necesario confirmar que no se tratan de campañas maliciosas. Es importante revisar el dominio remitente del correo, las características del mismo, y sobre todo, en lugar de pulsar el enlace de la oferta de turno, dirigirnos nosotros directamente a la web correspondiente, confirmando que dicha campaña es real.
Confirmar la reputación de tiendas on-line utilizadas. Es probable que estemos buscando un producto concreto, y el mejor precio de nuestras búsquedas nos lleve a una tienda desconocida. En estos casos es imprescindible revisar su reputación y confirmar que son de confianza. Una simple búsqueda en internet o redes sociales, nos permitirá acceder a reseñas y opiniones de usuarios que permitirán formarnos un grado de confianza, y sobre todo permitirá cerciorar que es una tienda legítima y no un timo.
Precaución con las tiendas falsas. Existen técnicas, como por ejemplo web scraping, que atacantes pueden utilizar para clonar portales legítimos y tratar de engañar al consumidor. Es importante confirmar que nos encontramos en la web oficial y no en una réplica falsa, para lo cual podemos revisar la URL y dominio, confirmar que posee protocolo seguro (https), ingresar nosotros directamente en la web en lugar de por enlace, y fijarnos en el diseño, que por muy bien que esté clonado, suele por pequeños detalles denotar que se trata de una falsificación.
Evitar fraudes de precios. Algunas empresas aprovechan para subir precios semanas anteriores, y promocionar descuentos que no son tales. Internet ofrece la posibilidad de comparar un producto en muchas tiendas a la vez, permitiendo además conocer cuál es el precio habitual de un artículo. Resulta además interesante portales como https://es.camelcamelcamel.com/ que siguen el coste habitual de un producto de Amazon a lo largo del tiempo, confirmándonos si realmente ha bajado de precio o no.
Utiliza métodos de pago de confianza, y si es posible con protección anti-fraude. Vigila los cargos en tu tarjeta de crédito habitual, paypal, o el método utilizado. Confirma que la pasarela de pago a la que te remite la tienda on-line es de confianza a través de su dominio y protocolo (https), y usa contraseñas seguras para estos accesos.
Desconfía de chollos imposibles. Es decir, si encuentras el nuevo iPhone por 450€, por sentido común debes considerar que se trata de un timo, nadie da duros a pesetas.